Nota suicida

Ven,
naufraga junto a mi hasta el filo del abismo.
Ahora,
hace frío y es inmenso el ocaso de la duda.

Perseguido por las sombras
seducido bajo un oscuro hechizo
también yo precisaré de tu mano
cuando a la luz de tu piel
sin miedo alguno
                                caiga

                                       lentamente

                                                        al

                                                         v
                                                         a
                                                         c

                                                         í
                                                         o

                                                       




Jaime Falcone (Softhwords®)

El Gólem

Soy el Gólem.
Una creatura de barro, sombra y piedra
a quien la chispa de una estrella dio la vida.

Vivo, muero, a la espera de mágicos conjuros
bajo una inclemente lluvia de blasfemias.

Soy el Gólem.
Un amasijo de ensueños
una ruinosa mole de esperanza.

Soy el Gólem
Cincelado corazón que sufre y ama
mientras un ángel vestido de luz viene a ofrecerme
de nuevo una manzana envenenada.

Soy el Gólem.
Vivo resguardado en la montaña sagrada
a la espera de la voz de un Dios antiguo
                                      que ya no llama...

Jaime Falcone. (Colombia, 2022)
A Medianoche.
Derechos Reservados

Infinitos

Tú.

Yo.

Partículas esenciales

sumergidos en la primigenia singularidad

desde el principio.

Magia

Energía

Intrépidos quarks

jugando a imaginar los multiversos

El anhelo de un Dios Infinito

atemporal

Que un día dijo..

¡Hagamos al hombre!

Imagen

Semejanza

Varón y hembra nos creó.

Y aquellas partículas huidizas

como rastro de luciérnagas

cobraron vida propia tras el diáfano bigbang

Hoy,

después de los eones

Volvemos a encontrarnos

Y sin saberlo

millones de años después de la explosión

recordamos nuestra historia

Aquel tiempo cataclísmico

cuando fuimos simplemente

dos  partículas perdidas

en la majestuosa ilusión universal

Y recordamos también

que allí

en el recién formado  espaciotiempo

nos miramos

-fijamente-

En nuestras almas aún vibra el déjavùh

del tacto esencial.

Recordamos haber bailado juntos

Solos

Lejos de la orgía de aquel cósmico bar

Y haber sellado nuestro encuentro con un brindis

elevando al horizonte de sucesos

Un par de martinis estelares

servidos en copas de plasma diamantino

Recordamos haber sido fundidos

Por un instante en el crisol esencial

¡Uno!

casi inexistente

Pero real y suficiente

Para saber 

que desde  siempre

nos hemos esperado

Y que el verdadero milagro ha sido éste

¡Reencontrarnos!

justo ahora...

¡Antes del fin!

Jaime Falcone.
Melodía secreta.
Colombia. (2019)

Etérea.

Desde que los ángeles sucumbieron ante el deseo y vinieron a la tierra para hacer suyas a las hijas de los hombres, dos razas han crecido en simultáneo aquí, en el tercer planeta desde el sol.

Las diferencias, tan marcadas al principio, fueron cambiando con el tiempo: la raza descendiente de aquel atrevimiento celestial amaba cada día más éste complicado mundo y sus deleites; mientras que nuestra raza terrenal, pura, y carnal; buscó tanto y tanto el ideal cielo, que cada día tomaba más distancia de éste mundo en que perecen todos los sueños de los mortales.

Ahora, miles de años después de los primeros híbridos, ni siquiera los más expertos angélico-antropólogos logran hacer la correcta clasificación de aquellos seres.

Sin embargo, de vez en cuando son gestadas algunas afortunadas criaturas con tan singulares genes, que aquellos casi extintos caracteres etéreos y divinos se manifiestan de nuevo, en todo su esplendor;  ¡tan dominantes..! que  dejan relegado el fenotipo humano y carnal  a un último lugar.

Angélica del Valle, por ejemplo, es quizá de ésta teoría la mejor prueba viviente. Lo noto cada vez que pasa a mi lado por los jardines del barrio. 

Yo, como todo un mortal, nada puedo hacer ante ese impetuoso remolino de viento que me envuelve quitándome de golpe la respiración -han de ser sus alas invisibles que se agitan recordando los jardines de la otra dimensión-.

Pues bien... cuando intento fijar mis ojos directamente en sus pupilas... ella me doblega la mirada con ese brillo mágico forjado quizá hace milenios en alguna distante explosión de supernovas, ese fantástico resplandor que seguramente quedó grabado para siempre en la poderosa retina de su arcángel ancestro.

De hablarle... ¡Ni se diga! Porque, aunque es obvio que ella pueda entender todos los idiomas del planeta, -Incluso el tartamudo-,  yo aún no estreno el libro de lenguas angelicales que encontré escondido en el compartimento más alto del estante azul, junto a los libros de yoga, en esa extraña librería céltica del centro, famosa por su mágico perfume de sándalo y canela.

¡Que suerte tengo! -pienso-. Pues por mi sangre no corre el mas leve asomo del linaje celestial. De ser así... ninguna terrestre criatura enamorada pudiera reflejarse en mis ojos, o  besarme; ni mucho menos abrazarme, o amarme aún en medio de mi profunda soledad. Si fuese como Angélica, y sus ancestros celestiales, tampoco a mí podría acercarse alguna simple mortal sin mas riqueza que un corazón enamorado, y es por ello, que a pesar de todo,  prefiero seguir siendo tan humano como soy.

¡Que mala suerte! -pienso luego-. Pues sólo aquella etérea mujer-ángel, a quien ni siquiera mirar puedo, ha sido quien desde siempre ha hecho volar hasta sus cielos mi imaginación.

Jaime Falcone  (Softhwords®  2018)
"Sinfonía para cupido"

Lo siervos de Cronos (El relojero)

No llora el tiempo el relojero
lo transforma 
En artístico amuleto
captura el infinito

Las piezas microscópicas asisten a sus manos
cual metales convocados a la alquimia
exquisitamente entrelazadas
una a una asisten al milagro del vivir

Hay talentos cuyo origen
se halla lejos de éste mundo y su compás 
Conocen de cerca el sucesivo tic-tac
de los efímeros segundos 

perdidos en la eternidad 
y el armónico circulo trazado
por la delgada pluma imaginaria

Un milagro a todas luces cierto
capturar en una misma joya

lo absoluto y relativo

Newton y Einstein

danzando al ritmo de la huidiza realidad.

Hay antiguos mitos hechos vida
en aquellas manos sabias
cómplices infatigables de la creación.
Dedos hábiles y diestros
de los pacientes arquitectos

 Alquimistas
que reducen a veinticuatro vueltas minuteras
cada giro de la tierra en que soñamos.

Míticos seres que nos traen
la magia rítmica y perfecta
en un estuche
cual minúscula caja de Pandora.






 

Jaime Falcone.
Inventario de reflejos®. (Colombia. 2016)

Contacto

CONTACTO

Desde la eternidad perdida en los confines del tiempo
nuestras almas extraviadas navegaron al azar
huyeron
sin rumbo
de la gran explosión
anhelando algún día volver a la unidad
-esa, que dejó de ser vacío y nada
gracias a uno de los éxtasis de Dios-.


Mas el verdadero milagro
es éste que ahora ocurre
cuando nuestras absortas pupilas
-paralelas galaxias ancestrales-
se reflejan, 
y un nuevo universo nace entre los dos. 


No te vayas. 
quizá una vez fuimos
Quarks, leptones, encantos,
de un mismo elemento primigenio
en perfecta fusión.


Lo que en el futuro
-Ahora - 
volveríamos a ser:
materia y antimateria
luz y oscuridad
Perfecto complemento. 


Y éste instante único
el de nuestro encuentro imposible
insignificante o inmenso
bien pudiese ser
la respuesta al misterio oculto
que todos llevamos dentro
y para los inconmensurables cielos
la última oportunidad
de presenciar un renacer.

Maravilla

I.

Jade y cristal
atravesaron las estepas Chinas

sobre el áspero lomo de los elefantes.

Turquesas del Tibet
bendecidas por los mantras sagrados de los monjes.

El mármol blanco y pulido
forjado en las canteras de Jodhpur.

Toneladas de lapislázuli afgano y amatistas de Persia
dejaron su rastro de luz desvanecido por el viento
en el camino sobre las dunas ocre del lejano erial.

Crisolita de Egipto
desde canteras nunca holladas por el pie de un Faraón.

El dulce reflejo del ágata del Yemen
guardando en sus huellas rojas

la antigua historia de un volcán.

Zafiros de Ceylán
rescatados desde sus escondrijos

en las entrañas de la tierra
hermosos y ligeros como plumas de colibrí.

Corales de Arabia
sus ojos absortos contemplaron

la diáfana quietud del homenaje.

Cuarzo de los Himalayas y diamantes de Golconda,
geométricas formas en cuyas aristas danza y se deleita

la esperanza de otras vidas bajo un nuevo sol.

Ámbar del océano Indico
huella en el tiempo

sangre de secuoyas milenarias.

El verde intenso de la malaquita rusa
evocando el fluir de la estigia
lugar del reencuentro rumbo al Hades.




II.

Junto a las aguas sagradas del Yamuna
el Shaj Jahan construyó la maravilla.

En Agra se reunieron las mas bellas riquezas del planeta
en honor a la princesa Mumtaz Arjunand.
Eterna ofrenda, increíble mausoleo
el polvo de los minerales transformado en auroras boreales
fue visible desde los oasis

/durante noches enteras/




III.

Existe una poesía, la he soñado
tan excelsa y majestuosa como el gran Taj Mahal.

Compartiendo su destino con el imponente mausoleo
el cual fue apenas el pálido reflejo del amor legendario del Shaj.

-¡Nunca existirá piedra preciosa comparable a la hermosura de Mumtaz!-.

Así, revestido por los cientos de vidas malgastadas en intentos infructuosos
se que no encontraré la metáfora perfecta para vos.

IV.



Agradezco al infinito
a tu imagen inasible
/a su luz/
Revelando la respuesta al epifánico misterio.

Y dejo de buscar ya en mis letras el perenne mausoleo

donde guardarte a eternidad.

Dejo también ya la poesía aquella viviendo para siempre

en el mundo inefable de los sueños.

Me basta con saberte  real en ésta dimensión

Danzante maravilla
Aroma dulce del jardín
amor de madre

final de  mi desierto.

La maravilla no hecha de letras

ni de preciosas piedras

sino de vida
de fuerza
y libertad.
La maravilla eres tu, madre adorada.

Mujer Maravillosa a quien hoy canto
pues mi vida se forjó en tus entrañas
y bajo tu amparo año tras año
he conocido el inefable amor.

Para :

Alba  Marina Mogollón Duque,
mi Madre amada.
En su cumpleaños.

Jaime Falcone
Softhwords. Colombia (2015)
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